Respuestas rápidas

En las otras carpetas hay respuestas completas, acá pondremos preguntas cortas con respuestas que no pretenden agotar el tema.

En general, han sido publicadas como entradas separadas y aquí las ponemos juntas.


¿Comulgar sin participar de la fe ni de la vida de al Iglesia?

Respuestas rápidas sobre la Comunión eucarí­stica

¿Cuánto cuesta una Misa?

¿Preparar a un nieto para la primera Comunión aunque sus padres no vivan la fe?

Recibí la confirmación sin confesarme, ¿qué hago?

¿Con qué mano hacer la señal de la cruz?


¿a que santo considera la Iglesia como el santo de la mortificación?

Nunca he oído hablar de un santo de la mortificación…

La mortificación por sí sola no santifica: es condición de santidad, pero no fuente de santidad ella misma.

Negarse a uno mismo es condición para amar a Dios y al prójimo, pero lo importante es amar.

Sí ha habido santos que han tenido una vida muy dura: te señalo dos ejemplos: el Santo Cura de Ars (San Juan María Vianney) y el Padre Pío.

En el caso del Cura de Ars, más discreto, fue muy mortificado para convertir a su parroquia. Es decir, la mortificación no era un fin en sí mismo: con la mortificación pedía a Dios la conversión de las almas que tenía encomendadas.

Al Padre Pío Dios lo hizo participar de la cruz de un modo particular: 50 años con los estigmas. Pero no sólo eso, sobretodo experimentó la falta de comprensión y de credibilidad: no le creían, mucha gente buena -incluso en el Vaticano- desconfiaba de la sinceridad de los estigmas, lo que los hacía mucho más doloroso.


En la Biblia, en Éxodo 20, los 10 mandamientos están en diferente orden y contenido de cómo se suelen enseñar: 1, 2, 3, 4… Lo digo porque en alguna parte de la Biblia leí que no se debe cambiar ni quitar ni aumentar a los mandamientos de Dios.

RESPUESTA: El número de los mandamientos


Charlando con un ateo me dijo que la biblia se contradecía y me dio algunos ejemplos

RESPUESTA: ¿Contradicciones en la Biblia?


Vivo en una ciudad donde hay una convivencia religiosa muy sana entre católicos y protestantes. Mi pregunta es la siguiente: ¿se puede ser padrino de confirmación para un niño católico siendo protestante? Me preguntaron y la verdad que no supe que decir. Hay algunos casos donde el sacerdote permitió esta situación, pero a mí no me queda tan claro. 

RESPUESTA: ¿Puede un protestante ser padrino de confirmación?


No entiendo este pasaje que dice: “Pero de aquel día o de aquella hora nadie sabe, ni siquiera los ángeles en el cielo, ni el Hijo, sino sólo el Padre.”

Según la doctrina de la Santísima trinidad, hay 3 Personas distintas y un solo Dios, una sola naturaleza divina, que es una y que por lo tanto, lo que conoce el Padre, lo conoce el Hijo y el Espíritu Santo. ¿No es así? ¿porque entonces, dice que no conoce la hora?

RESPUESTA: ¿Desconocía Jesús el fin del mundo?


Me preocupa que mi novio comulgue a pesar de estar en pecado mortal.

Él se justifica diciendo que a él le enseñaron diferente.
Le expliqué que antes tiene que confesarse, pero no logro convencerlo.

Quisiera preguntarle:
¿Qué es un sacrilegio? ¿Qué le pasa a la Eucaristía en cuerpo de un alma en pecado mortal? ¿Qué le pasa a un alma cuando comete un sacrilegio?

¿Cómo puedo convencerlo de que se confiese, de que únicamente con el Sacerdote recibes la absolución y nosotros no podemos perdonarnos a nosotros mismos?
Muchos dicen que no quieren decirle sus pecados a un sacerdote y que ellos piden perdón por su cuenta.

RESPUESTA: Mi novio comulga sin confesarse ¿cómo le explico que hace mal?


Nosotros perdimos cinco bebes de semanas pues se morían en mi vientre, fue algo muy doloroso y conflictivo interiormente, porque yo anhelaba tenerlos, sin embargo los perdía, y cuando me volvía a quedar embarazada sentía un conflicto por que no quería volver a perderlos. Ahora yo me pregunto donde están pues solo pude bautizar al último, pues antes no sabía que cualquiera puede hacerlo en caso de urgencia en ausencia de un sacerdote.

La doctrina católica enseña dos cosas al respecto:

1) que los niños que mueren sin el bautismo no pueden ir al infierno porque no tienen pecados personales.

2) Que el único medio que la Iglesia tiene para perdonar el pecado original, es el bautismo.

Armonizando estas dos verdades, tradicionalmente muchos teólogos solían resolver la cuestión diciendo que los niños que morían si el bautismo no iban ni al cielo ni al infierno, sino a un lugar de felicidad natural, pero sin visión de Dios, llamado limbo. En la revelación no había nada que sustentara esta opinión; y nunca fue un dogma de fe, sino un explicación común en muchos teólogos.

El Papa Benedicto XVI encargó a la Comisión Teológica Internacional que estudiara el tema. Las conclusiones de la Comisión son que no hay nada en la revelación que permita sostener la existencia del limbo. Y que, si bien el único medio que la Iglesia conoce para el perdón del pecado original es el bautismo, eso no significa que Dios no pueda perdonarlo.

De manera que confiando en la misericordia de Dios, la Iglesia puede esperar que los niños que mueren sin bautismo vayan a cielo.

Si bien no tenemos datos revelados para confirmar esta enseñanza, tampoco hay datos revelados para rechazarla. Y es la que parece más coherente con la misericordia de Dios.

De manera, que puede consolarse sabiendo que sus hijos están en el cielo. Es más, teniendo en cuenta que los padres tienen hijos cara a la vida eterna (no sólo para esta vida que pasa, sino sobretodo para la definitiva), con esos hijos están seguros de que han alcanzado la gloria para los que los tuvieron: los otros dos tendrán que “remar” para alcanzarla (como todos nosotros).

Incluso pueden pedirles cosas a sus hijos, sabiendo que pueden interceder por Uds. delante de Dios. Una persona en el cielo, tiene mucha más madurez de la que podamos tener en la tierra, independientemente de la edad  en que haya muerto.

Puede encontrar el documento  en la página de la Santa Sede: La esperanza de salvación para los niños que mueren sin Bautismo


Hay quienes dejan de asistir Misa poniendo como pretexto que no lo hacen, porque ven  que los que lo hacemos no cambiamos, seguimos igual o peor. Mi pregunta es:

¿Es correcto lo que dicen ellos y qué se les puede contestar?

Es sencillo darse cuenta que el argumento no tiene mucho sentido: carece de coherencia lógica. Decir que no voy a Misa porque los que van no mejoran, no quiere decir nada. Simplemente es una excusa: tratar de justificar algo que hacen mal (no ir a Misa), con defectos que otros podamos tener los que sí vamos.

Para analizar el tema razonablemente habría que ver si asistir a Misa es bueno o es malo. Si hace bien o hace mal. También habría que pensar para qué uno va a Misa y si faltar a Misa hace mejor a la persona, es muestra de amor a Dios, o es lo contrario.

Por último habría que considerar si quien va a Misa y no se porta bien; se portar mal porque va a  Misa (es decir, si ir a Misa hace mala a la gente).

Pero:

1) Ir a Misa es bueno: quien tiene fe en la Eucaristía, no tiene duda de esto (quien carece de fe en la Eucaristía ni se plantea ir o no a Misa, se supone que estamos hablando con gente que cree que Jesús está en la Eucaristía). Dios se nos entrega en la Eucaristía, y eso no puede hacernos mal.

2) Afirmar que todos los que asistimos a Misa nos comportamos mal o no mejoramos  es una agresión gratuita, sin fundamentación alguna. Obviamente tenemos defectos -como todos- pero lo normal es que procuremos portarnos bien, aunque no siempre nos salga. Este juicio colectivo condenatorio, negativo, generalizado, es injusto y carece de fundamento. Por otro lado, tendrían que demostrar dos cosas:

a) que quienes vamos a Misa somos peores que los que no van.

b) que somos peores precisamente por ir a Misa (es decir, la Misa es la causa de ser peores).

3) Puede ser que haya personas que asistan a Misa y lleven una doble vida (es decir, una vida incompatible con la vida cristiana). Pero eso no es culpa de la Misa. La solución para sus vidas no es dejar de ir a Misa, sino cambiar de vida y comportarse de modo coherente con la Misa.

4) Los defectos de los cristianos pueden dar mal ejemplo (y daremos cuenta a Dios de este mal ejemplo), pero no excusa de amar a Dios, rendirle el culto que le debo como mi Creador y Padre.

Habrá que animar a esas personas a compararse menos con los demás, a no buscar justificaciones para no ir a Misa y a descubrir la maravilla de la Eucaristía: vale la pena.


— Si cuando nos confesamos se nos perdonan los pecados, ¿por qué se dice que en el juicio seremos juzgados de toda nuestra vida? ¿no es esto contradictorio?

Cuando nos confesamos arrepentidos se nos perdona la culpa de los pecados confesados. Queda por reparar el desorden que producimos pecando, que lo purificamos en la tierra con buenas obras, las indulgencias, ofreciendo los sufrimientos de esta vida, etc. (y lo que nos quede al momento de morir en el purgatorio).

En el juicio seremos juzgados por nuestra vida, lo que incluirá las confesiones hechas. De manera que los pecados que hayamos  confesado, en el juicio no tendrán condenación. Se podría decir que la confesión es como adelantar el juicio con un cambio fundamental: los pecados que en el juicio merecerán la condenación, cuando uno los confiesa aquí en la tierra en el sacramento, reciben una sentencia de absolución en virtud de los méritos de Cristo.

Pero no te quedes con los pecados: es importante no pecar, pero mucho más importante es llenar la vida de obras buenas, de amor a Dios, de oración, de servicio a los demás, de santidad.

Si sólo miramos el no pecar, nos quedaremos con las manos vacías…


— Cuando yo falto a misa un domingo, por alguna razón, no ciento por ciento justificada,  y las posibilidades de recibir el sacramento de la reconciliación durante esa semana no es tan accesible, ¿es preferible que me quede sin comulgar en la misa del domingo siguiente ofreciéndole una comunión espiritual al Señor hasta que pueda recibir el sacramento de  la reconciliación?… ¿o puedo ofrecer mi arrepentimiento al Señor y poder recibirlo para que su presencia actúe en mi alma de una forma más profunda y me ayude a seguir de la mejor forma posible?

El tema es discernir si el incumplimiento del precepto fue culpable.

Hay que decir que la obligatoriedad de la misa dominical es grave, de manera que su incumplimiento es grave. Conclusión: si ese es el caso, no debés comulgar sin confesarte.

Ahora bien: el precepto no obliga con una grave incomodidad (enfermedad, cuidar a un hijo enfermo que no se puede dejar solo y nadie puede curarlo, etc.). A veces puede ser difícil saber la gravedad de la dificultad, si hubo falta de previsión, etc.

Como criterio te preguntaría cada cuanto te pasa y porqué motivos. Una persona que habitualmente va a Misa, que alguna vez tiene un inconveniente que trató de resolver pero no lo consiguió, la presunción es que no cometió falta grave. Ahora, si uno cada dos por tres, por problemas menores, deja de ir a Misa, diría que en general se puede presumir que incumplió el precepto.

Es un tema, como ves, tiene matices, de manera que es difícil escribir una respuesta determinante.

Si te parece que has faltado sin un motivo serio, confesate antes de comulgar: estarás más tranquila. Y en caso de no poder confesarte, ofrecele al Señor el dolor de no poder comulgar: ese deseo de recibirlo será muy valioso a sus ojos.


— He oído algunos programas radiales protestantes, en gran parte de los cuales aseguran que su iglesia no tiene una religión. Ellos dicen pertenecer a Cristo y dejan ver, más o menos, que una religión es sinónimo de tradición, culto, liturgia y sobre todo símbolo de mediocridad, de tibieza, de acudir a una iglesia cada domingo. Sobre todo aseguran que Dios es espíritu y no religión.

El planteo que has escuchado carece de sentido. Si quieren cambiar las palabras que las cambien.

Es ridículo tener una visión formal y artificial de la religión: cualquier religión es una forma de relacionarse con Dios. En este sentido cualquiera puede inventar una religión…

Tendrías que decirle a esos protestantes que tu religión y la de ellos es la misma: se llama cristianismo. Que no estemos unidos, es un problema, pero Cristo sí que fundó una Iglesia y puso a los Apóstoles a su frente, le prometió asistencia para siempre, etc.

Si leés inglés, te recomiendo los tracts de Catholic Answers: http://www.catholic.com/library/faith_tracts.asp

En castellano: http://www.corazones.org/apologetica/a_apologetica.htm

En http://www.conelpapa.com/ encontrarás de todo


– ¿Como explicarle a los no creyentes la existencia del mal, el sentido del sufrimiento?

El mal y el dolor son dos cuestiones que  no hace falta demostrar. Todos los experimentamos.

De la respuesta que se de a estos dos problemas de la vida, dependerán muchas cosas; y también en ellos se puede comprobar la  veracidad de una antropología: si la respuesta que se da a estos problemas es insuficiente, eso demuestra que tal antropología falla (es lo que pasa con la cultura de la muerte: la única respuesta que tiene para el dolor, es la eutanasia: eliminar al que sufre para eliminar el dolor; la única respuesta que da la problema de un embarazo complicado es matar del bebé).

Hay muchas explicaciones humanas que ayudan mucho a llevar el dolor, pero la explicación definitiva procede de la fe:

Por fe sabemos que es consecuencia del pecado original. Y también sabemos que Cristo asumiéndolo lo redimió y lo convirtió en redentor, de manera que aceptado en unión con Cristo, ese dolor salva y redime.

Un artículo sobre el tema: http://arvo.net/el-valor-del-sufrimiento/el-sentido-del-dolor/gmx-niv395-con10783.htm

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